Los mensajes de los tres ángeles son un llamado para que todo el mundo obedezca la Ley de Dios mediante la fe de Jesús. Dios hace que por todo el mundo haya quienes proclaman esta invitación, de modo que toda la gente pueda establecer una relación de compañerismo con Cristo y estar libre de pecado. La proclamación del juicio, que hace el primer ángel, es una apelación y una advertencia dirigidas a todos los que están presos en los engaños de Satanás.
Sin embargo, y por la razón de ser un mensaje para salvación, no es una táctica para lograr la sumisión por el miedo o el espanto. Es un examen, es un tipo de audiencia y exposición de lo que el poder salvador de Cristo ha hecho, en los creyentes y también por medio de ellos. Explica también la manera como trata el pecado. En este sentido, el juicio es el medio establecido por Dios para remover toda duda acerca del gobierno de Dios, de su trato con el enemigo, y de la efectividad del plan de salvación.
El resultado es la reivindicación completa del carácter de Dios ante el Universo, que reconoce no sólo que está libre de toda culpa, sino también que es digno de la más exaltada alabanza y de la más ferviente y firme lealtad.
El salmista, en su conocimiento del Señor, escribió :" Hazme
entender el camino de tus mandamientos, Para que medite en tus maravillas. Se deshace mi alma de ansiedad; Susténtame según tu palabra. Aparta de mí el camino de la mentira, Y en tu misericordia concédeme tu ley. Escogí el camino de la verdad; He puesto tus juicios delante de mí. Me he apega-
do a tus testimonios; Oh Jehová, no me avergüences. Por el camino de tus mandamientos correré, Cuando ensanches mi corazón." (Salmos 119:27-32).
"Mientras Cristo está purificando el Santuario, los adoradores (los creyentes) deben repasar cuidadosamente su vida, y comparar su carácter con la norma de justicia"